Me molesta como respiras
Me molesta como respiras
Me molesta como respiras. Me molestan tu olfato y tus otros sentidos. Me molestan tus ojos y mejillas. Me molesta como caminas, como comes, como sonríes. Me molesta tu existencia, tus virtudes y logros. Me molesta cada célula de tu cuerpo. Me molestan tus rodillas, la hidroxiapatita de tus dientes y huesos. Me molesta tu voz, tus oídos, tu nariz. Me molesta tu rostro y tu sombra. Me molesta tu presencia. Me molesta hablarte o escucharte. Me molestan tus clavículas, tus caderas, y tus glúteos. Me molesta la feminidad de tu piel. Me molesta el olor característico de tu ropa. Me molesta tu aliento y tus suspiros. Me molesta como me miras, como me escuchas. Me molesta todo de ti. Eres un cataclismo, el Armagedón, el último monstruo del calabozo.
Y más que todo, eres única y exclusivamente buena para odiarte, porque de ti lo quiero todo.